Virus virtual
Nos impusieron un lenguaje mediático, escribieron un libreto Chino y nos pusieron a repetir la frase que reina en la sociedad del televisor: “Tiempos de incertidumbre y emergencia sanitaria por la pandemia actual”. Y de ese modo nos obligaron a ser los extras de un capitulo de serie dramática de Netflix, y/o los repartidores noticiosos sin paga. Por suerte mi mente funciona como la de un director y guionista, y no sirvo para ser actor de reparto, ni figurante ni extra; y me di a la tarea filantrópica de dar respuesta al origen y al sentido de este brote, pues me sentí inmerso en una realidad post apocalíptica, donde la información, los datos, las cifras y las estadísticas que viajan rápidamente por el mundo de manera virtual, son principales propagadores del virus. Uno de tantos días me levanté de la cama con una desconfianza nueva, esta vez miré con recelo los bombillitos led del modem, ¡Claro!, las redes Wifi, la fibra óptica, la radiación electromagnética que se propaga en el vacío